
Cuando tenemos una entrevista de trabajo muchas veces vamos con nervios, ansiosos y con miedo. Es evidente que es una situación de estrés, que nos estamos jugando mucho y que lo que el entrevistador valore sobre nosotros durante esos 20 minutos que dure la entrevista va a ser clave para poder optar o no al puesto de trabajo. Sin duda, hay muchos nervios ahí. Pero tenemos que tener claras dos cosas fundamentales: la primera es que si nos han llamado a entrevista es porque a priori encajamos en el puesto, y la segunda es que la entrevista es el momento perfecto para demostrar que somos los candidatos idóneos para ese puesto de trabajo. Partiendo de estas dos ideas modifiquemos y respondamos la pregunta: ¿qué buscan los entrevistadores en los candidatos y cómo dárselo en la entrevista de trabajo?
- Buscan sinceridad y compromiso, y se lo daremos siendo honestos y adaptándonos a lo que demanden. Es decir, una entrevista es para venderte, sí, pero vender lo que tú eres, no lo que otros quieren que seas. Ser honrado y a la vez transmitir la capacidad para el puesto, demostrando flexibilidad y adaptación. Transmitiremos lo que somos, simple y llanamente, adaptándonos al perfil que nos demanden.
- Buscan una persona que se integre en el equipo y se lo daremos haciendo gala de nuestras habilidades sociales. En una entrevista, si nos atascamos, si no somos capaces de comunicarnos y de responder con coherencia, estamos transmitiendo que nos resulta difícil expresarnos en situaciones de estrés. Deberemos demostrar que tenemos habilidades sociales, que sabemos relacionarnos, que miramos a la persona con la que hablamos, que escuchamos y empatizamos, que somos asertivos y que, en definitiva, sabemos comportarnos. No buscan un super héroe, buscan alguien con el que trabajar codo con codo sea fácil.
- Buscan motivación y se lo daremos transmitiendo ganas. Y es que ésta es la clave. Por muy buen curriculum que tengas, por muchas habilidades sociales y por mucha sinceridad que transmitas, si no demuestras en la entrevista de trabajo que quieres desempeñar ese puesto de trabajo de verdad, no hacemos nada. Y aunque parezca una estupidez, demostrar ganas se hace con las palabras pero también con los gestos, con el tono de voz, con la mirada. La motivación es clave y debemos trabajarla para transmitirla realmente.