Filosofía zen para lograr tus objetivos

La cultura oriental es muy rica de cara a ofrecer ideas y conceptos relacionados con la filosofía. El zen aglutina diversas escuelas de budismo y tiene una trayectoria antiquísima y pone todo el peso en la meditación como paso para poder «despertar». Entendido de esta manera, el la filosofía basada en el zen nos puede ayudar a evolucionar y a crecer, o como dice Laia Monserrat en su blog presenciazen.com es una práctica meditativa que nos llevará a sentir la serenidad original y a liberarnos del sufrimiento a través de la experiencia de un yo mas interno y profundo. Para ello el zen propone ejercicios que favorecen la experiencia de contacto con esta parte interior de la persona que no está sometida a los miedos y preocupaciones del ego o personalidad condicionada.
Visto esto, ¿cómo puede ayudarme el zen para lograr mis objetivos? Conozcamos sus principios básicos:
- Eliminar el desorden. Organiza tu vida, tanto si estás en desempleo como si no tienes que conseguir tener una limpieza física y mental. El desorden, el actuar sin sentido, dificulta y ralentiza los procesos.
- Integrar la vida de ocio y de trabajo. Aunque estés en búsqueda de empleo, vive tu tiempo de ocio y diferéncialo de tu tiempo de búsqueda.
- Simplificar y racionalizar. Muchas veces tendemos a complicarnos la vida, a dejarnos llevar por el famoso «y si….» cuando en realidad lo realmente operativo es ser práctico y lógico.
- Menos es más. Calidad es la clave. No por mandar 100 curriculums de manera generalista e indiscriminada voy a conseguir antes trabajo. Si mando 10 curriculums a empresas seleccionadas y de una manera personalizada tengo más opciones.
- Ser auténtico. Aprende a ser consecuente y coherente. Responder a la pregunta de ¿quién soy a nivel profesional? de manera honesta y realista, abierta a la autocrítica, me ayudará a clarificar y a ser diferente, auténtico.
- Mantener la capacidad de asombrarnos. Aunque no nos lo creamos, aún pasan cosas buenas, y conocerlas y congratularnos por ellas nos motivará mucho más.
- Tener momentos de soledad y calma. El zen se basa en la meditación, por eso este punto es fundamental, el pensar de manera sosegada, evaluar lo que hacemos y reflexionar sobre el camino que estamos llevando nos ayudará a reenfocarlo y optimizarlo.